El Nuevo Testamento contiene las primeras fuentes de información acerca de Jesús de Nazaret. Algunos de los materiales, tales como las cartas de Pablo, fueron escritos ya en el año 48 o 49 d.C. y poco después (Gálatas, 1-2 Tesalonicenses, y 1-2 Corintios). Los Evangelios comienzan a circular en algún momento en los años 60 d.C. Prácticamente todos los estudiosos concuerdan en que el Nuevo Testamento contiene material que se remonta directamente a Jesús de Nazaret. Una parte importante de la actividad académica se centra en el aislamiento de los sub-estratos de material que constituye la base de las narraciones del Evangelio incluidos los relatos de testigos oculares, las tradiciones orales e incluso fuentes escritas. Ninguna otra fuente a partir del primer o segundo siglo d.C. proporciona material que se puede utilizar con la confianza de que el Nuevo Testamento ofrece en la reconstrucción de la vida y ministerio de Jesús.
“Esto significa que si los historiadores desean saber lo que Jesús dijo e hizo, ellos están más o menos limitados a utilizar los Evangelios del Nuevo Testamento como sus principales fuentes. Permítanme resaltar que no se trata de razones religiosas o teológicas-por ejemplo, que en éstas y sólo en éstas se puede confiar. Son pura y simplemente por razones históricas. Jesús es apenas mencionado por fuentes no-cristianas desde hace más de un siglo después de su muerte, y los demás autores del Nuevo Testamento están más preocupados por otros asuntos. Además, los relatos del Evangelio fuera del Nuevo Testamento tienden a ser tardíos y legendarios, de gran interés en sí y de por sí, pero de poca utilidad para el historiador interesado en saber lo que pasó durante la vida de Jesús. . . las únicas fuentes disponibles para el historiador interesado en la vida de Jesús son, por lo tanto, los Evangelios del Nuevo Testamento”. “Bart D. Ehrman es profesor distinguido James A. Gray, de Estudios Religiosos en la Universidad de Carolina del Norte en Chapel Hill.
Bart D. Ehrman, The New Testament: A Historical Introduction to the Early Christian Writings (El Nuevo Testamento: Una Introducción Histórica a los Primeros Escritos Cristianos) 4th ed. (New York: Oxford University, Press, 2008), 229.